Los deberes (2017)
En un instituto público de enseñanza secundaria, el claustro de profesores entra en conflicto cuando descubre un arma de fuego en la mochila de un alumno. El joven, de origen estadounidense, lleva apenas dos años residiendo en España. Defiende que posee licencia de armas y que no lleva intención alguna de utilizarla; con una tranquilidad y seguridad pasmosas, declara que, simplemente, lleva el arma encima. Comienza así un combate dialéctico entre un profesor de Ética y el alumno, que terminará revelando verdades más profundas. ¿Bajo qué luz puede abordarse la violencia en las aulas? ¿Las herramientas de la nueva escuela sirven para una concienciación real? ¿Qué papel juegan el Estado, la escuela, la familia, en la perpetuación de la violencia como modo de relacionarnos? ¿Qué es la violencia?
DATOS TÉCNICOS: 2 actores (edad adulta, edad adolescente). Duración +75'. Público: adulto. Formato: mediano. No estrenada.
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Edición publicada en la obra colectiva V Laboratorio de Escritura Teatral (dir.: Carles Alberola):
Sobre la obra. Motivaciones del autor
La forma elegida para tratar los temas e inquietudes de Los deberes es la estructura de acto único, o “escena-río”, que cubre todos los acontecimientos en una charla de tensión gradual entre Pedro, el profesor de Filosofía que cita al alumno, y Matthew, el joven estadounidense. Consciente de manejar material sensible al elegir abordar estos temas, empleo un recurso dramático extremo, donde el problema de la credibilidad se coloca en el foco central de atención (Mayorga: “Aunque sea verdadero, si no es verosímil, no vale”).
Ahora bien, ¿qué son los deberes? Una de las competencias en la memoria escolar de la asignatura de Pedro es “Aplicar derechos y deberes de la convivencia ciudadana en el contexto de la escuela”. Aparentemente, los deberes serían aquellos en los que Matthew debe aplicarse para ser capaz de coexistir en sociedad como ciudadano libre y responsable, aunque no forme parte de su “cultura”; en definitiva, salir de su lógica de supervivencia mediante el recurso a la violencia.
Sin embargo, es interesante confrontar esta visión con su contralectura: quien no ha hecho sus otros deberes ha sido el profesor al creer hasta este momento que vivía en “el mejor de los mundos posibles” (citando el Cándido, de Voltaire) y el ser humano es “bueno por naturaleza”. Más que una encarnación del mal, Matthew es la bisagra, quien muestra a Pedro que en definitiva éste es un mundo que se rige por mecanismos salvajes y la violencia es en última instancia el medio empleado en todos los ámbitos, como acaba ocurriendo en el tramo final de la obra. Matthew resultaría ser “el mensajero”; el ejercicio/la estrategia pasaría por "dar la voz al diablo" (empleando los términos del filósofo y divulgador Slavoj Žižek) para lograr alcanzar una ética adecuada de convivencia.
V Laboratorio de Escritura Teatral (Muestra de Dramaturgia Contemporánea 2017, Sala Berlanga, Madrid). Dir.: Beatriz Bergamín. Intérpretes: Carlos Lorenzo, Ángeles Martín, Sergio Otegui, María San Miguel, Yoíma Valdés. Fotografías (c) Luis Camacho
